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Manual de estrategias "#YLAI4All" para negocios, asociaciones y comunidades incluyentes

Los jóvenes de las Américas rebosan de creatividad, diversidad y potencial. A medida que nuestro hemisferio se vuelve más incluyente al acoger el mérito de las comunidades marginadas, también debemos ser francos con respecto a la historia que ha impedido que los grupos marginados disfruten de todos los beneficios que ofrecen las economías dinámicas y en crecimiento.

Fomentar la diversidad, la equidad, la inclusión y la accesibilidad en nuestras comunidades propicia la pertenencia, mejora los medios de vida y favorece las condiciones para que haya prosperidad y surjan oportunidades para todos. Si estás listo para explorar lo que se necesita para hacer realidad la visión de crear un entorno más incluyente, el manual de estrategias “#YLAI4All” es para ti.

Los cimientos: La comprensión de la diversidad, la equidad, la inclusión, la accesibilidad y la pertenencia

Vamos a cubrir los conceptos fundamentales del marco de la diversidad, la equidad, la inclusión, la accesibilidad y la pertenencia (DEIAP), incluso la definición de términos clave y sugerencias sobre temas de conversación para ayudarte a comprender de mejor manera cómo tomar decisiones incluyentes en tu negocio.

Si bien este marco puede ofrecer muchas ventajas en el lugar de trabajo y la comunidad, estos esfuerzos serán insuficientes a no ser que exista un sentido de pertenencia. Cuando las personas se sienten que realmente pertenecen en el trabajo, la comunidad y las alianzas, sienten mayor conexión y dedicación.

Definición de la diversidad, la equidad, la inclusión, la accesibilidad y la pertenencia

Dediquemos un momento a definir más términos clave para que puedas comprender la importancia que el marco de la DEIAP tiene para ti, tu comunidad y tu negocio.

La diversidad es la comprensión y la representación de identidades variadas, que incluyen, entre otras, la raza, el origen étnico, el idioma, el género, la identidad de género, la educación, la orientación sexual, la condición socioeconómica, la cultura, el origen nacional, las creencias religiosas, la edad, las capacidades y las discapacidades, de manera colectiva e individual. La diversidad como concepto debería abarcar la aceptación de diversos orígenes y perspectivas. 
La equidad es el trato justo, la igualdad de oportunidades y la equidad en el acceso a la información, los recursos y los materiales para todos. Si bien la igualdad tiene como objetivo tratar a todos por igual, la equidad permite que exista un espacio para las necesidades, las experiencias y las oportunidades específicas de cada persona o grupo. 
La equidad es la garantía de un trato justo, acceso y oportunidad en el diseño de nuestros sistemas y procesos. 
La inclusión tiene que ver con una cultura de pertenencia por invitación, participación y contribución activas por parte de todas las personas, con el reconocimiento y la aceptación de sus diferencias. La inclusión es la práctica de la incorporación auténtica de grupos o personas marginados en los procesos, actividades y toma de decisiones de una manera que se comparta el poder y garantice la igualdad de acceso a las oportunidades y los recursos.

La accesibilidad se refiere a la igualdad de acceso, oportunidades y adaptaciones para que las personas con discapacidades disfruten de las mismas interacciones, servicios y entornos de los que disfrutan las personas sin discapacidades. La accesibilidad implica las maneras en que las organizaciones incluyen las características que cada persona puede aportar a una organización. 
La pertenencia es el objetivo emocional de la inclusión que hace que todos se sientan bienvenidos y cómodos en un espacio incluyente, y no solo libres de existir sin incomodidades, discriminación y ausencia de adaptaciones, sino también capaces de sentirse cómodos al enfrentarse a cualquiera de esas barreras sin sufrir represalias.

La historia y el sesgo implícito Adoptar una perspectiva histórica con respecto al marco de la DEIAP implica comprender los entornos sociales, culturales, económicos, intelectuales y emocionales que dieron forma a las vidas y a las acciones de las personas en el pasado. Un componente clave para revertir la opresión y los sistemas opresivos es considerar el papel de la historia y la manera en que ha afectado a las comunidades marginadas. Al hacer referencia a la historia, es fundamental tener en cuenta tu sesgo implícito y los posibles sesgos de quienes la relatan. Suelen haber muchas perspectivas sobre cada acontecimiento histórico, y cada una de estas perspectivas está influida por los sesgos de la persona. Cada persona ve y comprende los acontecimientos históricos de manera diferente dependiendo de su edad, expresión de género, posición social, raza, creencias y valores. Desconecta de la internet y conversa empleando estos temas: 

¿Qué significa para ti pertenecer a algo? ¿Cómo perteneces a tu hogar, tu comunidad y tu lugar de trabajo? 
¿Qué implica ser un negocio incluyente? ¿Qué valores debe tener este negocio?
¿Cuáles son tus pronombres? 
¿Qué contexto histórico existe que influye en los sesgos dirigidos a tu comunidad? 
¿Qué información errónea o desinformación y estereotipos se han atribuido a tu comunidad? ¿Cómo te hacen sentir?
¿Has sido tú o tu comunidad el blanco de sesgos a lo largo de la historia?

Definición de la interseccionalidad

“La interseccionalidad es una lente a través de la cual se puede ver de dónde viene el poder y dónde colisiona, y dónde se entrelaza y se entrecruza”. —Kimberlé Crenshaw

Una persona no solo se define por su expresión de género, raza, color de piel, origen étnico, clase, discapacidad o sexualidad; las personas son una combinación de estas y muchas otras identidades. Las identidades que se entrecruzan influyen en la manera en que cada uno de nosotros experimenta nuestro mundo y en la manera en que aportamos perspectivas diversas a nuestra comunidad y a los lugares de trabajo.

La interseccionalidad (en inglés) es el marco que permite comprender la naturaleza interconectada de las organizaciones sociales, y de las identidades y experiencias que coinciden para comprender mejor las desventajas y los sistemas de discriminación a los que se enfrentan las personas a consecuencia de las muchas y complejas interconexiones. La interseccionalidad es fundamental a la hora de considerar e implementar la equidad.

Adoptar un enfoque interseccional en tus esfuerzos por asimilar el marco de la DEIAP, al comprender estas identidades y establecer un negocio o una alianza que refleje la diversidad de tu comunidad o equipo, requerirá de una planificación cuidadosa, un diseño incluyente centrado en el ser humano y una implementación exhaustiva a lo largo del tiempo.  

Desconecta de la internet y conversa empleando estos temas: 

¿Puedes clasificar algunos aspectos de tu identidad (p. ej., tu edad, raza, capacidad física, educación, creencias religiosas, ubicación geográfica)?
¿Qué identidades tienen el mayor efecto en la manera en que te percibes a ti mismo?
¿Qué identidades tienen el mayor efecto en la manera en que te perciben los demás?

Algunas de estas identidades pueden captarse más o menos en diferentes contextos sociales, pero muchas de ellas, consciente o inconscientemente, influyen en el modo en que navegas por el mundo y percibes a los demás. Comprender estas identidades te ayudará a reflexionar sobre tus privilegios sociales y las relaciones entre grupos, dentro y fuera del lugar de trabajo, y te brindará un mejor contexto para presentarte como un aliado de los grupos marginados. 

¿Qué son los grupos marginados?

Un grupo marginado es un grupo o una comunidad discriminada y excluida de la vida prevaleciente social, económica, educativa, política o cultural. 

Ejemplos de poblaciones marginadas incluyen, entre otros, grupos excluidos por motivos de raza, expresión de género, orientación sexual, edad, clase social, acceso a la educación, y capacidad física o mental. La marginación es el resultado de relaciones de poder desiguales entre grupos sociales. 

Las personas que se identifican como parte de grupos marginados suelen tener que superar más barreras para acceder a recursos y oportunidades que las personas que pertenecen a grupos más privilegiados. Es decir, cada persona y cada caso son diferentes, y la intersección de estas identidades también comprende un factor clave en el acceso a oportunidades. Una sociedad u organización que se centra en la equidad posibilita que las personas marginadas alcancen la igualdad de condiciones. 

Desconecta de la internet y conversa empleando estos temas: 

¿Te considerarías miembro o conoces a alguien que se consideraría parte de una comunidad marginada?
¿De qué maneras tu/su identidad afecta tu/su posición en la sociedad?

¿Qué son las microagresiones?

En el lugar de trabajo, los grupos marginados suelen enfrentar formas sutiles de discriminación a través de microagresiones. Las microagresiones son desaires, insultos, indignidades y mensajes denigrantes, leves y cotidianos, contra grupos marginados, a veces bajo la apariencia de cumplidos y a veces involuntarios, pero que reflejan sesgos profundamente arraigados. Aunque cada experiencia individual de una microagresión puede ser leve, su impacto acumulativo es perjudicial.

Para crear lugares de trabajo incluyentes, acogedores y saludables, debemos reconocer de forma consciente estos sesgos y combatir las microagresiones. Advierte tus propios sesgos y exponte a diversas perspectivas para manejar de manera productiva tus propias acciones en el lugar de trabajo, y crea conciencia, defiende y ampara a las personas que son el objeto de microagresiones.

La comprensión y el afrontamiento de los sesgos

Todo el mundo tiene sesgos y estos sesgos pueden afectar muchas decisiones que tomamos. Nuestros sesgos implícitos levantan barreras y fomentan desigualdades. Al comprender (en inglés) e interrumpir esos sesgos y prevenir el surgimiento de sesgos nuevos, podemos hacer de nuestras comunidades y lugares de trabajo espacios en los que todas las personas pueden ser atendidas y sentirse bienvenidas. 

¿Qué es un sesgo? 

Un sesgo comprende una fuerte inclinación a favor o en contra de una cosa, persona o grupo, en comparación con otro. Los sesgos suelen ser perjudiciales e injustos. Hay dos tipos de sesgos: los sesgos conscientes, o explícitos, y los sesgos inconscientes, o implícitos. 

Los sesgos inconscientes son típicamente estereotipos sociales que las personas crean fuera de su propia conciencia y pueden presentarse de muchas formas. Si se actúa sobre la base de estereotipos y sesgos, se puede generar un ciclo de prejuicios y discriminación.

Algunas formas comunes de sesgos son el sesgo de similitud, el sesgo de afinidad y el sesgo de conformidad, aunque otras formas de prejuicios basados en sesgos pueden incluir el sesgo de edad, el sesgo de género, el sesgo de origen étnico, el sesgo racial y el sesgo de nombre. Los sesgos pueden afectar todos los aspectos de la vida de una persona, incluidas la educación y la trayectoria profesional. Estos son particularmente evidentes en las prácticas de contratación.

Desconecta de la internet y conversa empleando estos temas: 

¿Alguna vez te has enfrentado a una situación en la que alguien demostró tener un sesgo sobre tu persona? ¿De qué otra forma desearías que hubiera actuado? 
¿Puedes pensar en un ejemplo en el que tus sesgos implícitos influyeron en una decisión que tomaste? ¿Cómo crees que podrías haber tomado esa decisión sin tener un sesgo?

Los sesgos pueden surgir de muchas formas en tu negocio, alianzas y comunidad. Ser consciente de tus propios sesgos, y crear consciencia en tu red sobre los de esta, te ayudará a crear un entorno más incluyente. Para comprender mejor las formas de los sesgos y estudiar un caso de sesgo inconsciente, completa el cuaderno de trabajo “#YLAI4All Workbook”. Todos podemos trabajar juntos para prevenir los nuevos sesgos, desafiar los que ya existen y limitar el impacto general que tienen. 

CONTINÚE A LA PARTE II